Más de 420 familias emeritenses han pedido cita en la sede de Servicios Sociales para solicitar las ayudas de contingencia que oferta la Junta de Extremadura, cuyo plazo límite para recibir las peticiones finaliza el próximo 30 de noviembre. Para agilizar estos trámites, la delegada del área, Mercedes Carmona, se comprometió en la reunión que mantuvo el pasado lunes con miembros del Campamento Dignidad a que permanecerá abierta la ventanilla única que se habilitó desde el viernes en el ayuntamiento para la recepción de las solicitudes.

"Hemos tomado esta medida en previsión de la cantidad de gente que iba a solicitar las ayudas y del plazo tan reducido", explicó la delegada, quien reconoció que hay pocos trabajadores sociales para atender a tantas cuestiones. Por ello, a través de esta ventanilla "hemos ganado tiempo", porque una vez registrada la instancia en el consistorio, cuando al solicitante le citen para acudir a los Servicios Sociales, el documento ya estará en posesión del trabajador social.

"Garantizamos nuestro trabajo para atender todos los requerimientos que nos haga la Junta", afirmó Carmona. Sobre este asunto, cabe recordar que el decreto aprobado por el Gobierno regional sustituye a las antiguas Ayudas para la Integración en Situaciones de Emergencia Social conocidas como Aises. Su objetivo es garantizar de manera temporal la cobertura de los recursos personales básicos para la subsistencia que no puedan ser atendidos por los medios propios o recursos sociales e institucionales disponibles. A cada unidad familiar solo se podrá conceder una ayuda por convocatoria, salvo que se produzca otra circunstancia sobrevenida a la primera solicitud, sin que en ningún caso pueda superarse la cuantía máxima de 1.500 euros.

Por otra parte, el consistorio ya ha solicitado al Gobierno extremeño los 125.000 euros que le corresponderían a la ciudad de los 5 millones de euros que la Junta destinará a garantizar el acceso de los ciudadanos a unos suministros mínimos vitales de luz y agua. "Habrá que estipular unos 60-80 euros por factura, ya que cada uno tiene que ser consciente del consumo", apuntó la edil, quien animó a pedir las ayudas, ya que "muchas veces la gente que más lo necesita se queda en casa". Asimismo, Carmona aseguró que "si el ayuntamiento tiene que ampliar esa cuantía porque nos quedemos cortos, se ampliará, pero para pagar aquellas facturas que realmente sean acordes a las necesidades".