El proyecto de modernización turística del embalse de Proserpina estará listo en mayo, cuando la zona dispondrá de cinco chiringuitos de madera, agua potable, aseos, duchas, pasarelas y playas artificiales que, de momento, tendrán menor superficie de la prevista debido a la subida del nivel del agua.

El alcalde, Ángel Calle, ha visitado las obras, que han sido adjudicadas a la empresa Movens Terra Omnis S.L. por un presupuesto de 877.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses, y que ya han comenzado, con algo de retraso debido a las lluvias.

Ahora se están ejecutando los movimientos de tierra y las canalizaciones pues, según ha explicado el director general de Urbanismo del Ayuntamiento, Enrique Díaz de Liaño, los chiringuitos estarán conectados a la red de saneamiento del Museo del Agua y contarán con agua potable, además de corriente eléctrica procedente de un transformador aledaño.

Las obras se ejecutan en la zona comprendida entre la presa romana y el Centro de Interpretación Museo del Agua, en la que se instalarán cinco chiringuitos prefabricados en lugares "estratégicos" que ofrezcan la mejor visión del lago.

Cada uno de ellos dispondrá de un módulo bar de 50 metros cuadrados, otro aledaño de la misma superficie para la zona de restauración, además de aseos y almacén, todos ellos con acabado en madera rústica.

Además, una barandilla recorrerá la zona de los chiringuitos para separarlos de las playas artificiales, de la que partirán pasarelas hacia la zona de baño.

Sobre este asunto, el administrador de la empresa adjudicataria, Francisco Bedmar, ha precisado que debido a la subida del nivel de agua, no se podrá acondicionar las playas hasta la cota prevista en un principio.

Según ha indicado, se regenerará la zona entre los chiringuitos y, una vez que baje el nivel de agua, "se hará hasta donde la cota permita".

El alcalde ha destacado que con este proyecto se resuelve una "asignatura pendiente" con Proserpina y ha precisado que la concesión de los chiringuitos se hará mediante concurso, respetando la antigüedad de aquellas personas que han explotado los ubicados anteriormente en la zona.

Asimismo, se ha comprometido con los vecinos a buscar financiación para dotar a la zona, "a medio plazo", de una red de alcantarillado perimetral en la que puedan verter sus aguas residuales.

Ha precisado que existen varias fórmulas, como la financiación estatal, la autonómica, la municipal y las contribuciones de los propios vecinos, "que tendrán que pagar algo por tener una red de saneamiento adecuada", pues "le saldrá mucho más barato que limpiar los pozos ciegos que tienen ahora".

Además, ha recordado que el presupuesto municipal de 2010 incluye una partida para la pavimentación de las calles de esta zona que, según ha anunciado, también tendrá un apartado de Correos y acceso a redes de telefonía, dado que la empresa Telefónica está negociando con el propietario de una parcela para instalar la torre necesaria.

"Espero que los vecinos, una vez que cumplamos el compromiso, no quieran convertirse en una pedanía porque me parecería una estupidez en un mundo globalizado", ha añadido Calle.