TNtos pasamos la vida corriendo deseosos de alcanzar metas. Alguna vez nos hemos preguntado: ¿No sería más corto el camino si consideráramos el pasado un mapa y no un guía? Es verdad que en el mapa del pasado encontramos como constante de todos los tiempos actitudes represivas. Pero de ninguna manera hemos nacido para eso. Somos un soplo cálido de eternidad. Estamos aquí para disfrutar y compartir el cariño inmenso que nos rodea cuando estamos en familia. La vida es un abrazo temprano a quienes queremos y un beso sincero en aquellos encuentros que llenan los ojos de esperanza y la piel fresca de alegría. ¡Adelante! aunque nos parezca que hay mayor empeño en sofocar los proyectos que nacen que en abrirle cauces para que fluyan vigorosamente. Se hace camino olvidando cuando debemos olvidar y recordando cuando debemos recordar. Al reflexionar sobre nuestras vivencias, revisando nuestros actos, analizándolos sin ningún tipo de adorno, ni justificaciones oportunistas, descubrimos que a veces hay que volver sobre nuestros pasos y cambiar actitudes. La vida es siempre camino hacia adelante entre riesgos, aventuras y sorpresas, expectación y respeto.

*Sacerdote