Si hay algo que no se le puede negar a Ana Lafuente (Madrid, 1967) es su empeño y dedicación a su principal objetivo diario, que es el de mejorar la calidad del suministro eléctrico que presta Iberdrola en Extremadura. Muy a su pesar, la delegada de la compañía en la región está siendo noticia estos días por los apagones del fin de semana pasado en varios pueblos de La Vera, que han generado una gran crispación vecinal.

Lejos de esconderse, el mismo domingo desvió su recorrido y se dirigió a la zona para conocer in situ y junto al presidente de la mancomunidad el alcance de la incidencia e intentar solventarla. Allí pudo comprobar de primera mano lo cabreados que están los vecinos con Iberdrola, empresa sobre la que penden serias dudas de que haya invertido lo suficiente en el pasado en ésta y otras zonas de la comunidad.

Lafuente , ingeniero superior industrial que lleva en Iberdrola casi una década, encaja bien las críticas y reconoce el error, pero se lamenta de que episodios como el de La Vera hagan pensar que Iberdrola no persigue mejorar el servicio cada día. Esta directiva tiene ya una larga experiencia nacional e internacional, pues de 1997 a 1999 trabajó en una empresa del grupo en Bolivia. Desde el 2001, es la cara de Iberdrola en la región.

B. G.