Según los medios de comunicación los sindicatos docentes, todos, CSIF, CCOO, STE-ex, FETE y ANPE, amenazan con reventar la evaluación de junio. Su queja principal es la fusión de los institutos de Llerena y Castuera que provocará que se pierdan alrededor de veinte empleos.

Como profesor, estoy totalmente en desacuerdo en el momento y en las formas, en plena evaluación de junio, olvidándonos de que como docentes ante todo nos debemos a nuestros alumnos. ¿Qué responsabilidad tienen los alumnos de los problemas laborales de los profesores? Si ponemos un símil con el colectivo sanitario, es igual que si los facultativos y sanitarios en general realizan una huelga cuando están a punto de operar. Para los médicos, sus pacientes, por su código deontológico es lo primero, y para los maestros y profesores nuestros alumnos deben y tienen que ser lo primero. Las reivindicaciones laborales, muy legítimas todas, deben plantearse en otro escenario y con otros actores, y no con los alumnos en el final de curso.

Como afiliado a un sindicato de los detallados, el espíritu sindicalista debe y tiene que ser otro, no utilizando a nuestro principal activo de futuro en esta sociedad, nuestros alumnos. Ese comportamiento deja mucho que desear. Si es así no contéis conmigo. En cambio contad conmigo cuando con argumentos razonados no hagamos daño a nuestro alumnado --existen épocas para ello--, para hacer las huelgas que sean necesarias, y con cajas de resistencia, como se ha hecho toda la vida, y que cada palo aguante su vela.

Y como padre, que queréis que os diga, si seguís adelante con el planteamiento me parecería una deshonestidad que utilicéis a nuestros hijos para conseguir un objetivo laboral, situación que se conoce por medios de comunicación hace ya varios meses y no os habéis planteado las movilizaciones hasta ahora.

Joaquín León Cáceres **

Badajoz

Profesor de Secundaria