La Federación de Asociaciones de Vecinos de Mérida ha puesto el dedo en la llaga al reclamar al equipo de gobierno municipal del PP que no sea tan permisivo en la concesión de permisos para instalar veladores, mesas y sombrillas en calles y plazas.

La irrupción en el espacio peatonal (con autorización) de ese mobiliario, dificulta el paso de las personas e imposibilita que los niños tengan suficiente sitio para jugar.

Se puede poner varios ejemplos: hay un establecimiento que tienen sombrillas a lo ancho de la calle, con lo cual para pasar tienes que sortearlas. Otros, junto a monumentos, ocupan prácticamente todo el sitio peatonal, colocando los veladores de forma que dificultan el paso de las personas y en algunos casos las obligan a caminar por zona empedrada. Un establecimiento ha ocupado totalmente con veladores un espacio peatonal, instalando incluso una barra. Cerca de otro importante monumento, otro bar ha acotado una gran superficie para sus veladores. Nada más hay que darse una vuelta para comprobarlo.

Ahora, a ese viejo edificio que hay en la Puerta de la Villa, se le está lavando la cara para transformarlo en un bar restaurante, con lo cual la mitad del espacio se llenará de veladores, ahogando el uso peatonal de ese lugar. Pienso que el ayuntamiento debía haber expropiado ese edificio, derribarlo y hacer un pequeño jardín que diera realce a ese sitio, simplemente aplicando el criterio de utilidad pública como han hecho recientemente con el colegio Santo Angel.

Antonio M. Olivas Salguero **

Mérida