Cuando a Juan, a Andrés, a Carmen, a Antonio, a Carlos, a Edu..., se les murió la madre, el piso donde vivían no se pudo mantener, pues les subieron el alquiler y la prestación que cobraban no llegaba para pagar. Y a la calle. Fueron a por ellos y de golpe y porrazo tuvieron que aprender el idioma de la desesperación. Es entonces cuando el éxito del sufrimiento se traduce en seguir viviendo. Se cierra la puerta y te despides de todo, un resumen de tu vida. Una pesada carga, un doloroso deseo que emerge para llevarte a un mundo con fecha de caducidad.

Un largo viaje a ninguna parte, en tránsito, que incluye los momentos más dolorosos que no se ven, que no los ve nadie. El drama solo acaba de empezar, es el inicio del desprendimiento: adiós al jarrón, a la cafetera, a la mecedora… Todo eso formó parte de la angustia y la desmemoria, una especie de milagro que comparten el altruismo agresivo que no quiere lágrimas, que prefiere el silencio ahogado en cerveza o vino o en pastillas para la depresión, con la inmobiliaria que se llevará lo que dejaste, parte de un recuerdo que será testigo de lo que sabes y también de lo que ignoras.

Los amigos serán el mejor alivio para olvidar los mismos paisajes, aquellos hogares perdidos donde ahora habitan nuevos rostros. Las fotos son el peor veneno de esa larga enfermedad que no tiene cura.

Cuando aún te queda alguna, no debes mirarla si no hay alguien que te ayude a levantarte. El museo de las pérdidas es un espacio destinado a almacenar lo que dejamos atrás, allí donde se pierde el nexo con lo que existió.

tráfico

Siniestralidad al alza

Rafael Mas

Barcelona

Es muy preocupante el exagerado aumento del porcentaje de siniestralidad en el tráfico. Pero los grandes acontecimientos, en general buenos y malos, no se producen de hoy para mañana. Y este alarmante dato, sin duda, tiene diversas causas. En primer lugar, un sistema de exámenes para la obtención del permiso con aplicación de fórmulas poco eficaces y racionales. En el examen teórico no se exige asistir a ningún curso de seguridad vial, se exige cuando el conductor ya está cansado de incumplir la ley. Reeducamos a los que no han sido educados. En segundo lugar, autorizamos a los conductores con permiso B (coche) -con tres años de antigüedad- a conducir una motocicleta de un máximo de 125cc sin ninguna prueba teórica ni práctica. Y, entre otras causas que repercuten también en la formación, en el último año, los aspirantes al examen práctico han tenido que fraccionar su preparación porque la DGT no disponía de un número suficiente de examinadores. Se han aplazado miles de exámenes y el Gobierno ha dejado de ingresar millones de euros en tasas. Todo muy lamentable.

EMPLEO

Vivir del enchufe

Alejandro Cid

Barcelona

Hoy en día, tener titulación y estudios no sirve de gran cosa. Los jóvenes, y no tan jóvenes, emplean mucho tiempo y dinero para estar en constante preparación, pese a ello, en la mayoría de trabajos existe el típico enchufado, pariente del gerente o del jefe, cobrando un sueldo más que digno sin estar muy preparado. Muchas veces, la mala gestión de las empresas aflora gracias a gente inepta e incapacitada ocupando un puesto que le viene grande.

Entre otros, un motivo de peso por el que muchos licenciados trabajan de cajeros o reponedores: su puesto está ocupado por alguien sin formación, pero claro, es sobrino del director. Casos similares ocurren en los negocios familiares, es la manera de que «todo quede en casa» y antes que ingresar capital a algún desconocido prefieren pagar a un pariente.