TLta risa por las mañanas. El abrigo en las noches de invierno. Las consultas en la doctora y tu manera de mirar. Tu primer vestido. Mi manera de crecer sabiendo que existen los abismos del cariño. Una caricia y muchas más. El paseo de los sábados. Los juegos en el parque. Por fin es tu cumpleaños. Me estoy haciendo mayor, pero me siento vivo contigo. El timbre del colegio. Tus amigas. La emoción de que ellos sean ya padres. El mar que pisarás por primera vez y la arena que rozará tu cuerpo. Los abuelos y tanto cariño a cambio de menos horas en el reloj. La luz que irradiarán tus ojos cuando se crucen con los míos una tarde de invierno gris. El día que caminarás sola mientras queremos protegerte, el primer abrazo que acabó con el dolor de la espera. Los pies y las cosquillas, el pelo y los parecidos, la vida por delante- El verano tiene luz y te trae lo mejor del mundo como un regalo. Hoy ella ya tendrá una casa donde guarecerse, donde sentir que la lluvia cae afuera, donde los perros la protegerán de los ladridos de la noche. Por fin ha llegado a ese hogar cercano la niña más esperada, cuando el oro parecía más lejos y el tesoro ya está entre los brazos. A veces hay que recorrer algunos desiertos para llegar a la meta. Empieza la fiesta y deslumbrará agosto. Una estrella en el rellano, una lámpara que guía. Tus primeros calcetines, la espuma de la bañera y un "te quiero" para siempre. Hace falta sufrir para alcanzar el sueño. El viaje mereció la pena. Lágrimas nuevas, ojos de alegría. Quizá resuene tu llanto entre tanto grito. Esta mañana me he levantado pensando n ti y en tus nuevos padres. Y me he sentido bien. Gracias a la vida. Prometo ir a visitarte con un regalo tan grande como tú.