Lectores

Los trabajadores de

Seat se equivocan

Pedro Serrano Martínez

Correo electrónico

Los trabajadores de Seat se congelan el sueldo durante un año. Parece un titular más, pero les confieso que a mí se me ha congelado la esperanza ante esta noticia. Una noticia que me temo traerá cola y marcará un antes y un después. Y es que, de reivindicar un digno poder adquisitivo hemos pasado de repente a pedir de rodillas que no nos quiten el puesto de trabajo, por muy indigno que éste sea. Y no quiero ser mal pensado, pero en el espejo de Seat se van a mirar muchas empresas para desgracia de la clase trabajadora.

No sé si a ustedes les ha pasado lo mismo, pero cuando escuché la noticia me dije: ante este sacrificio de los trabajadores la empresa debe de estar encantada. Pues no señor. La empresa aún no está satisfecha. Quiere más. Quiere más sangre obrera a precio de saldo. Y es que son insaciables. ¿Cómo van a pararse ahora que tienen a sus presas acorraladas y asustadas? Ahora es el momento de hacerlas claudicar.

Ahora bien, queridos directivos insatisfechos: no olviden que, para jugar a su juego ventajoso, necesitan la colaboración de perdedores que compren lo que ustedes venden. Y si a los perdedores ya no les queda nada que perder, a ustedes también se le congelaran las ganancias y, tal vez, la sonrisa.

EL VOTO DE LOS EMIGRANTES

¿Por qué decidensi no están?

Juan C. Nieto Conejero

Mérida

Pasadas las elecciones a los parlamentos gallego y vasco es el momento para que los responsables políticos intenten solucionar (no hay que esperar a las campañas electorales de dentro de 4 años) la multitud de problemas existentes con el derecho al voto de los emigrantes.

Mi opinión es que los emigrantes españoles, a partir de determinados años ausentes de su localidad de residencia en territorio español, sólo pudieran votar en elecciones de ámbito superior: generales, europeas y referendos de carácter nacional, que es donde, a mi modo de ver, se deciden las cuestiones que les afectan como ciudadanos españoles de pleno derecho que son. Es muy largo y complejo de explicar, pero baso mi opinión en que una persona que no reside en un municipio o en una comunidad autónoma de manera frecuente (algunos de los emigrantes del Río de la Plata nunca han residido en España, ni tan siquiera han estado) difícilmente puedan decidir sobre las cuestiones particulares, en algunos casos muy particulares que se deciden en ámbitos locales y/o autonómicos. A modo de ejemplo, no me parece correcto que una persona que nunca ha estado en España elija a quiénes en mi municipio van a decidir cuánto he de pagar al año por la tasa de recogida de basuras.

Por otro lado, la legalidad vigente en cada momento deja bien claro quiénes tenemos derecho a ser españoles o no, empero, yo no tengo tan claro que las leyes actuales aclaren quiénes son en cada momento --a efectos electorales y sin entrar en absurdos debates nacionalistas-- quiénes son vascos, gallegos, valencianos, extremeños o madrileños-

Todo ello a mi entender se utiliza de forma muy partidista en cada momento político, por lo que a lo largo de nuestra reciente historia democrática, el partido que está en la oposición, en campaña electoral quiere esclarecer este tema y quien está en el poder lo quiere siempre obviar.

En cualquier caso, si los emigrantes ausentes han de votar en elecciones municipales y autonómicas, este derecho se tiene que regular con absoluta fiabilidad y transparencia. Sin duda ganará en salud la democracia.