TEtn un gesto sonriente y laudatorio, que acaso le agradezcan los gays británicos y españoles, Tony Blair elogió públicamente a Zapatero diciendo que era "más guapo y más joven que él", envidiables circunstancias que corrige el tiempo . ¿Se le escapó a Blair un lapsus freudiano, y asomó en el premier una pluma? Supongo que no. Blair jugó al zorro artero y le dio a nuestro tierno José Luis un lobuno consejo y otra conseja siniestra: el poder mancha, colega --traduzco a Blair --, y en cuanto pasen unos años tú también estarás pringado del lodo de la política, como todos nosotros. Eso dijo Blair: que el poder es fango. Y que Zapatero huele a inocencia. Ojalá la bruja se equivoque y Caperucita se coma al lobo. Ojalá muden los tiempos.

*Escritor