Hace 7 años que el alcalde emeritense y el presidente extremeño no se reúnen como Dios manda. Finalmente la reunión se producirá en las próximas semanas, dejando atrás un rosario de agrios desencuentros políticos. Mérida lo agradecerá. Sus dos principales mandatarios no pueden vivir de espaldas. Además, la cita tiene una dosis añadida de morbo por el previsible salto de Pedro Acedo al ruedo regional. Ya veremos la foto.