No me puedo creer que los españoles tengamos tan poca memoria de quien fue el gobierno conservador que promulgó una ley liberadora de los mercados, incluido el precio del suelo y la vivienda por la que ahora los españoles estamos pagando las consecuencias de esta crisis mundial con mucha más crudeza que el resto de los países de nuestro entorno.

Todos sabemos que las política de libre mercado sin ningún control que regule los precios de los mismos, cuando la demanda de un producto es superior a las ofertas que ofrecen los mercados, los mercaderes elevan los precios de los mismos según de grande sea la demanda de los productos de los demandantes.

Y si además coincide con una época de gran crecimiento de bonanza económica en parte debido a la construcción inmobiliaria, se suele producir el efecto dominó pero a la inversa, los ciudadanos quieren invertir sus ahorros en el producto que ha originado dicho crecimiento, sin observar que cuanto más solicitudes hay para comprar los pisos más se disparan los precios de los mismos.

Aquella ley del 96 del señor Aznar de liberar el precio del suelo y de la vivienda, le puso en bandeja a los grandes especuladores inmobiliarios para que acumularan grandes fortunas, mientras que millones de españoles han tenido que hipotecar la mitad de sus vidas para adquirir dichas viviendas y para rematar la faena de las consecuencias de aquella ley, es que ahora con la caída de las ventas de los pisos como consecuencia de la crisis que padece todo el mundo, los trabajadores que construían dichas viviendas han incrementado en paro en nuestro país con mucha más crudeza que el resto de los países de nuestro entorno.

Joaquín García Mayo **

Alburquerque