El microrrelato es quizá el género más cultivado hoy día. Una buena noticia si no tuviéramos que recordar el exceso de confianza de tantos y tantos que aspiran a destacar en la microficción sin tomarse la molestia de estudiar previamente el género. Habría que leer al detalle a los grandes: Marco Denevi , Jorge Luis Borges , Julio Cortázar ... y, ya que estamos con argentinos, el bonaerense Eugenio Mandrini , autor de Criatura de los bosques de papel (1987) y de Las otras criaturas, este último publicado en 2013 por Menoscuarto.

En Las otras criaturas, Mandrini nos ofrece 102 microrrelatos (en 115 páginas) que vienen a analizar la condición humana desde de un nutrido bestiario habitado por tigres, caballos, unicornios y arácnidas, criaturas entrañables en las que se apoya Mandrini para, sorteando las efímeras notas de actualidad, tratar los grandes temas, esos que nos preocupan casi desde Atapuerca: la inmortalidad, el paso del tiempo, el sentido de la vida...

Mandrini evita con éxito una de las vertientes más habituales del microrrelato, la liviana-humorística (que tanto peligro entraña si no se domestica a tiempo), y pone su talento a disposición de ideas profundas. Una narrativa donde se nota la mano del poeta que hay en él, ese poeta que se atreve incluso a desacralizar a la propia poesía ("Los misterios de la poesía" o "No todo es desierto en el desierto").

Las otras criaturas es un gran libro de pequeñas piezas literarias, una fiesta irrenunciable para aquellos lectores que vemos en el microrrelato un ágora donde reflexionar y preguntarnos sobre esas otras criaturas que somos los humanos.