Periodista
PULSO ELECTORAL. Ha comenzado la campaña oficialmente. A las cenas, reuniones, visitas, piruletas y degustaciones de pre-campaña, le sucederán ahora las cenas, reuniones, inauguraciones, cenas, visitas, saraos, degustaciones y piruletas de campaña. Todo un galimatías para bordear leyes, que todos incumplen de alguna manera. Mientras los fuertes gastan dineros de imposible control, las candidaturas con pocos recursos aguzan la imaginación y tratan de conquistar los medios.
EL BIPARTIDISMO. Las opciones de gobierno regional en Extremadura las tienen PP o PSOE. El bipartidismo aquí es más realidad que en otras partes. De nuevo el PP estrena candidato, mientras los socialistas siguen contando con Ibarra. El camino para Rodríguez Ibarra está expedito por una personalidad arrolladora en lo externo y un reconocimiento, sin fisuras, puertas adentro del PSOE. El caso del joven Carlos Floriano es absolutamente distinto: de puertas afuera no cuenta con reconocimiento popular ni su imagen pública ha impactado entre los ciudadanos, ni ganado confianzas. En cuanto al apoyo del PP de Extremadura a su liderazgo, existen muchas dudas y la rumorología ha empezado a trabajar en Mérida. La familia tiene sus medios dispuestos para el día después de las elecciones: no habrá piedad para Carlos Floriano, si pierde, como cantan todas las encuestas.
MERIDA Y PLASENCIA. La vuelta del PSOE al gobierno municipal de las grandes ciudades podría empezar por aquí. De ocurrir, la anunciada caída de Floriano no se produciría y el PP podría tener un buen candidato para dentro de cuatro años, ya sin Rodríguez Ibarra en la cabecera del cartel socialista.
