Funcionario del Ministerio de Defensa

En octubre de 2002, el PP en el Congreso de los Diputados rechazó una proposición no de ley del PSOE por la que se instaba al Gobierno a la creación, en la Base de Santa Ana, de Cáceres, del Centro de Formación de Reservistas Voluntarios. Proposición no de ley presentada con la finalidad de dar continuidad al uso militar de dicha base, una vez decidido el cierre del Cimov n.º 1 a lo largo del presente año 2003.

Al mismo tiempo, la directiva de Defensa Nacional dictada por el presidente del Gobierno en 2000, plantea la necesidad de fomentar la cultura de Defensa, la participación activa de los ciudadanos en el objetivo básico de la Defensa Nacional que, por sí mismo, supera, como concepto político, la acción militar.

En ese fomento de la cultura de Defensa, se plantea, por quien suscribe, la necesidad de desarrollar las previsiones en materia de Reserva y Movilización recogidas en la Ley 17/1999, de personal de las Fuerzas Armadas. Y en base a ello, sería conveniente que, al menos desde las instancias locales, provinciales y regionales tanto del PP como del PSOE, volviera a plantearse la conveniencia de crear en la Base de Santa Ana el Centro de Formación de Reservistas Voluntarios.

Una vez cerrados por el Gobierno y el Parlamento los aspectos básicos de la concepción estratégica se debe abrir una segunda fase para determinar las capacidades de nuestras Fuerzas Armadas, tanto en lo relativo a los efectivos con los que deben contar, incluidas las fórmulas de movilización y reserva, que es una de las carencias de más urgente suplencia a partir del cierre de esta revisión estratégica.

Al hilo de esto conviene solicitar al ministro de Defensa que ordene un esfuerzo de trabajo en su departamento, y esto tiene un corolario que es el siguiente: si reducimos las unidades cuantitativamente militares, las contingencias que puedan ocurrir tenemos que tenerlas resueltas de futuro. Esto lo hace Estados Unidos. Me estoy refiriendo al instrumento idóneo: el reservismo. Hay que desarrollar el reservismo --y está en la Ley 17/1999, creo que entre los artículos 160 y 180--. Fíjense que en los Estados Unidos, con los conflictos que están teniendo, se han producido llamamientos a reservistas, aunque ellos tienen otra estructura, sin necesidad de modificar el contingente de fuerza operativa sobre el territorio, sin crear nuevas divisiones, ni unidades, ni compañías hacen un llamamiento al reservismo y éste tiene ya encomendadas sus funciones. A nosotros la ley nos da derecho hasta al reservismo obligatorio. La Ley 17/1999 en el capítulo del reservismo, señala cinco misiones para los reservistas. Una de ellas es defensa ecológica, defensa de catástrofes naturales. En una catástrofe como la que ha ocurrido en Galicia o que pueda ocurrir en otro sitio, aparte de las unidades de tropas operativas en esa zona militar, el ministro de Defensa hubiera podido decir: voy a hacer un llamamiento y mañana a las nueve de la mañana a los reservistas de tal llamamiento para que se personen y tener ahí este personal operacional. Tenemos una ley que lo dice y resulta que no la desarrollamos. Creo que ha llegado el momento, al reducir el contingente de fuerza a 75.000 hombres, que se hace imprescindible en España activar el reservismo para hacer frente a toda contingencia que se vaya a presentar en este momento. Al cabo de las reformas que está planteando el Gobierno en todos los frentes políticos, también ha de establecerse esta reforma en el ámbito de la Defensa. Y todo ello, partiendo de que en la ciudad de Cáceres existen unas instalaciones como las de la Base de Santa Ana capaces de ser el Centro de Formación de Reservistas y, de paso, continuar siendo Centro de Formación de Tropa Profesional adscrito a las Academias Militares de las Armas (Infantería, Artillería y Caballería). Sería bueno para la ciudad de Cáceres que desde el PP, que gobierna en ella y ejerce el gobierno de la nación, se asuman criterios como los expuestos, y se plantee, de nuevo, la proposición no de ley rechazada en octubre de 2002.