El relevo generacional en el clero está en apuros. 104 de los 153 sacerdotes de la diócesis placentina tienen más de sesenta años y sólo 32 son menores de cincuenta. Con los años y al ritmo actual de ordenaciones, el futuro no es muy halagüeño y por eso la promoción de las vocaciones es una de las prioridades manifestadas por el obispo, Amadeo Rodríguez Magro, desde el momento de su consagración en agosto del año pasado.

Hoy se unirán dos sacerdotes más, que serán los primeros que ordene Amadeo Rodríguez como obispo de Plasencia. En la ceremonia que se celebrará a las 17.30 horas en la catedral ordenará también diácono a Antonio Corrales Muñana, natural de Villamesías mientras que los jóvenes Roberto Hernández Castaño -- de Pueblonuevo de Miramontes-- y Antonio José Triguero --de Manchita-- harán los números 154 y 155 de una diócesis cuya población ronda los 260.000 habitantes, según los datos facilitados por el obispado.

En julio del año pasado fueron tres los ordenados por el obispo placentino residente en Roma, Cipriano Calderón, quien convirtió entonces en diáconos a los dos jóvenes que hoy pasarán a ser presbíteros.

RETO Este es el último paso desde que siendo seminaristas, pueden hacerse lectores --con autorización para leer el Evangelio-- y acólitos --para dar la comunión-- Una vez terminados los estudios del seminario, se ordenan diáconos con lo que pueden consagrar y confesar, pero deben pasar un año de preparación pastoral de la mano de un párroco para llegar a ordenarse sacerdotes. La de esta tarde es una ceremonia solemne a la que asistirá una gran parte del clero placentino.

La edad media de sus nuevos compañeros es de 66 años, según las mismas fuentes, y 37 de ellos no tienen ya parroquia porque son mayores o porque ocupan cargos en el obispado. En teoría, los sacerdotes se jubilan con 75 años, pero siguen en activo si se encuentran bien. De ahí que la promoción de las vocaciones es uno de los objetivos que el obispo anunció en la homilía de su consagración.