Los vendedores ambulantes del mercadillo de La Hispanidad dicen sufrir un agravio comparativo por parte del ayuntamiento con respecto al comercio. El colectivo se quejó ayer de la severidad de las sanciones por no dejar limpia la zona del mercado una vez que recogen y reclamó la misma dureza de trato para los comerciantes de la ciudad que ensucian las calles con bolsas y cartonaje.

El presidente de los vendedores de la Hispanidad, Luis Gómez, aprovechó ayer la visita de la Policía Fiscal, a la que envió a la zona la concejal delegada Carmen Blázquez para imponer las primeras multas a los puestos que no limpiaron el pasado martes para advertir: "Si nos damos una vuelta un martes a mediodía por la calle del Sol también vamos a encontrar bolsas y cartones y sin embargo a ellos no se les sanciona como a nosotros".

Según Gómez, los vendedores están sometidos a un acoso continuo. "Nos dicen que no nos salgamos de la línea, que no pongamos más de los metros que tenemos, cosa que no podemos hacer porque tenemos al vecino al lado, y ahora esto". Además, fue tajante al criticar las sanciones que impiden al puesto infractor instalarse durante dos martes: "Son muy severas porque hay mucha gente que solamente tiene esto para sobrevivir y así se les quita el puesto de trabajo".

67.200 EUROS DE IMPUESTOS

Gómez no es contrario a sancionar si se deja sucia la zona: "Está bien para concienciarse de que hay que limpiar. Sanción económica, sí". Sin embargo, advirtió de que de los 140 vendedores de la Hispanidad, al menos 120 limpian y resaltó que en los días de aire, aunque recojan hay cosas que vuelan de un lado a otro y puede caerle la multa al que no es culpable.

Con todo, recordó al ayuntamiento que cada puesto paga de impuestos unos 480 euros al año, lo que significa que todo el mercadillo deja 67.200 euros en las arcas municipales y denunció que a cambio reciben sanciones y no los servicios que necesitan como baños públicos o policía permanente, e incluso se ha notificado varias veces al ayuntamiento que algunos puestos se inundan cuando llueve debido al desnivel de la calle y aún están esperando que se tomen medidas. Gómez tiene intención de reunirse con la edil delegada para exponerle todos estos problemas.