Dos vecinos de Plasencia y otros tres llegados de fuera fueron detenidos el sábado en una redada en la que la Guardia Civil intervino una cantidad importante de heroína que habría puesto en el mercado miles de dosis previsiblemente destinada a San Lázaro, según las fuentes consultadas. Después de casi nueve horas prestando declaración, la jueza ordenó ayer tarde su ingreso en prisión preventiva.

Los cinco detenidos fueron sorprendidos en el camino viejo de Serradilla a primera hora de la tarde del Sábado Santo en un espectacular despliegue de los grupos antidroga de la Guardia Civil. Según testigos, los agentes les dieron el alto cuando parecían estar en tratos y se los llevaron esposados. Luego volvieron por sus coches, de gama alta.

La presencia de sus numerosos familiares a la puerta del cuartel de la Guardia Civil hasta bien entrada la noche y ayer casi todo el día en los juzgados no pasó desapercibida para los muchos vecinos y visitantes que atravesaban la plaza de la catedral al encuentro de la procesión. Como tampoco su traslado a media tarde a los calabozos de la policía local a la espera de ser conducidos a la prisión de Cáceres. El Domingo de Resurrección fue maratoniano para las fuerzas de seguridad y para los funcionarios del juzgado número 3.

La redada fue la misma tarde en que la Guardia Civil escoltaba la procesión del Sábado Santo y ayer ya corría la noticia de que se había cogido algo más de un kilo de heroína a dos conocidos vecinos de etnia gitana. Pero está bajo secreto de sumario.