El retablo de la Virgen del Puerto es, desde el martes, un enorme hueco vacío que se va a someter a un tratamiento contra la plaga de termitas que habían empezado a corroer los pies de la imagen de la patrona. Los expertos esperan haber saneado la pared antes de final de mes para proceder a la instalación del nuevo retablo que está siendo sufragado por suscripción popular. Al camarín le llegará el turno después.

Empieza así la cuenta atrás para la sustitución del retablo carcomido cuyos trámites iniciaron los Siervos de María y el obispado a finales del año 2000. El artesano de Horche José Antonio Martínez ha realizado el nuevo retablo a imagen y semejanza del original, de estilo barroco, y que se cree similar al de la ermita de la Salud. Cuando se instale en el santuario llevará ya colocados a ambos lados los lienzos de la Anunciación y la Asunción que han sido pintados y cedidos por el polifacético sacerdote José Martín Majadas.

FALTAN 36.000 EUROS MAS

Los fieles han aportado ya cerca de 60.101 euros, pero harán falta 36.060,73 más para liquidar la obra por lo que continúa abierta una cuenta en la Caja de Extremadura. El rector del santuario, Javier Badillo, alabó ayer la generosidad de los placentinos e indicó que los cultos no tendrán que suspenderse a consecuencia de las obras mientras la imagen de la patrona ha sido bajada a la zona de los bancos y protegida por una verja. Ha sido elegida esta fecha para no entorpecer las bodas que se aglomeran a partir de la primavera.

El viejo retablo ha quedado reducido a tablas desperdigadas alrededor del andamio, si bien algunas partes han podido guardarse para el recuerdo. El grave ataque de insectos xilófagos que sufría desde hacía ya años hacía desaconsejable su restauración, según los expertos.