Los vándalos se han ensañado ahora con los espejos retrovisores de los vehículos que encuentran a su paso cuando regresan a casa la madrugada del domingo después de una noche de fiesta. Hasta una decena de vehículos aparcados en la avenida del Ejército sufrieron su ira el pasado fin de semana y los propietarios de cuatro de ellos decidieron poner una denuncia en la comisaría, hartos de tener que pagar lo que otros destrozan.

Los afectados se quejan de que "no es la primera vez que pasa, ya llevan bastante tiempo haciendo esto" y piden al ayuntamiento más vigilancia en la calle. "A mi me han reventado el espejo y voy a tener que pagar más 130 euros por él, pero a mi novia le reventaron a patadas la semana pasada la puerta del acompañante y la broma le ha salido por 900 euros", señalaba uno de los denunciantes tras el suceso, mientras otro decía sentir "indignación e impotencia porque a mi coche le han dado 3 o 4 patadas y el arreglo me va a costar 360 euros".

PIDEN VIGILANCIA

La inseguridad que sienten es tal que algunos no tienen intención de poner retrovisores nuevos porque "para qué me voy a gastar más dinero si el próximo fin de semana me lo pueden volver a romper". Aunque también hay quien ha alquilado una cochera tras sufrir estas gamberradas .

No todas las quejas han sido verbales porque uno de los afectados llegó incluso a enviar un correo electrónico al propio concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Corisco, quejándose de la situación pero "no me ha hecho ni caso, tendría que ver si eso es dejadez porque la policía lo único que hace es poner multas. Sé que el ayuntamiento no me lo va a pagar pero qué hago, ¿me hago un seguro a todo riesgo, me voy a un garaje?". No dudan de que "falta vigilancia".