En la primavera del 2007 la antigua colonia militar de La Inmaculada se habrá convertido en una residencia de Alzheimer con vistas al parque de Los Pinos y a la avenida de la Hispanidad de los mercadillos del martes para los 120 enfermos que tendrán plaza más otras treinta para personas mayores asistidas en un centro de día, según avanzó ayer el director general de Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Campón.
Campón visitó el solar con Antonio Bermejo, jefe del gabinete de Presidencia de Caja Extremadura, la institución que costeará en solitario la obra con una inversión de 3.600.000 euros.
Les acompañaban la alcaldesa y el concejal delegado Victoriano Durán, que lo calificó como "la flor de Bienestar Social en esta legislatura". Mientras Elia Blanco insistió en que éste es un compromiso del PSOE fuera del programa electoral por el que la Junta de Extremadura eligió Plasencia para abrir el único centro de la provincia destinado a enfermos de Alzheimer. Montijo acogerá, por su parte, el único que se construirá en la provincia de Badajoz.
EDIFICIO SINGULAR En tres meses estará listo el proyecto para empezar las obras en verano con un plazo de ejecución de dos años. Estas son las fechas que calcula la Caja de Extremadura, que pagará las obras en el solar de 10.000 metros cedido por el ayuntamiento para la residencia que gestionará la Junta y que traerá también a Plasencia la creación de un centenar de puestos de trabajo.
El proyecto ha sido encargado a los arquitectos Manuel Sainz de Vicuña y Javier Hergueta, que ayer adelantaron que será "un edificio moderno, pero respetuoso con el entorno". El granito está desechado, habrá tres plantas como máximo y la idea es construirlo por módulos. Está en estudio la posibilidad de dejar las casas en primera fila como seña de identidad de lo que fue la colonia militar.
El gobierno del PSOE prefirió cedérselo a la Junta para tal fin en lugar de recalificarlo para uso residencial y venderlo tan pronto como los tribunales se lo devolvieron a Plasencia tras un largo litigio. No obstante, requirió una modificación puntual del PGOU que lo calificaba para zona verde y uso sanitario extrahospitalario. Lo que aprobó inicialmente ya el pleno municipal y sólo está a la espera de la confirmación de la Junta.
En el expediente de cesión, el ayuntamiento valoró estos 10.000 metros en pleno centro de Plasencia y con el uso que marca el PGOU en 2,5 millones de euros que se dispararían de haberse recalificado para la construcción de viviendas.
