El Hospital Virgen del Puerto lleva al menos diez días con el TAC averiado, lo que está obligando a trasladar pacientes a los centros de Coria y Navalmoral para hacerles un escáner ante la queja de afectados por la pérdida de tiempo que supone y la agonía que sufren, mientras tanto, de no saber si su familiar tiene o no una lesión cerebral.

El TAC es una prueba que hay que hacerse si alguien sufre un traumatismo en la cabeza por una caída o por un accidente, si se marea sin causa aparente, si presenta dificultades para hablar y numerosos casos más. O sea, que es muy frecuente, pero en el hospital placentino tendrán que esperar a que se repare el aparato. Lo que el SES aseguró ayer que será hoy, como mucho.

"Nadie tiene culpa de que se averíe y si no se ha podido arreglar antes es porque los técnicos vienen de Alemania porque no es una reparación que puedan hacer los de mantenimiento", explicaron ayer escuetamente fuentes del SES.

Al parecer estas averías están siendo frecuentes, lo que obliga también a movilizar medios y personal sanitario para realizar los traslados. En helicóptero o UVI medicalizada en caso de emergencia o en ambulancia. Si no es grave basta con que un enfermero acompañe al paciente, pero si la situación lo requiere, debe ir también un médico y solo hay uno para traslados, con lo que surge el problema si se dan dos casos a la vez, por lo que un enfermo tendrá que esperar.

Los afectados también se quejan porque algunos han sido derivados por segunda vez. "A mi padre le llevaron a hacer el TAC y volvió a Plasencia, pero luego lo mandaron al Infanta Cristina", dijo ayer un familiar.