La Concejalía de Servicios Municipales ha atendido lo que los vendedores y usuarios del mercado del viernes en la Puerta del Sol venían reclamando desde la legislatura anterior y ha prohibido el paso a los coches para seguridad y comodidad de unos y otros. Parecía una misión imposible porque la anterior corporación se negó, pese a disponer de un informe favorable del técnico del mercadillo, para no impedir el acceso de los coches al garaje.

Sin embargo, la entrada queda asegurada por la antigua travesía y los consumidores pueden comprar en el tradicional mercado de frutas y verduras sin miedo a los coches. No en vano ha habido percances como el de un comprador al que le pasaron las ruedas por los pies.