Los placentinos tampoco están satisfechos con la obra de rehabilitación del tramo de la muralla entre las puertas de Berrozana y Coria. Las personas consultadas en la calle coinciden en criticar el resultado, que algunos llegan a calificar de "horrible" y se quejan, sobre todo, de la utilización de hormigón y de que se ha perdido el aspecto original del monumento.

De esta forma, se unen a las críticas de arqueólogos, historiadores del arte y del PP, que esta semana tiene previsto pedir la comparecencia del director general de Patrimonio para que conteste a diversas cuestiones sobre la intervención que se ha llevado a cabo. Incluso, una figura tan destacada en el PSOE placentino como Félix Dillana no dudó en manifestar en Canal Norte Televisión: "Como ciudadano, creo que es una chapuza " y dijo haber pedido a la alcaldesa una reunión con el consejero de Cultura para tratar el tema.

ENCUENTRO CON EL CONSEJERO

Mientras, en la calle no entienden el uso de un material como el hormigón en el monumento: "No sé a cuento de qué lo han utilizado. No he visto nunca ninguna otra muralla que tenga hormigón", señala un vecino.

Otros critican el impacto visual que produce el tramo rehabilitado en comparación con los que permanecen intactos: "Lo han cargado tanto de tal que se ve muy poco la piedra. Ha perdido el aspecto que tenía antes".

Además de esto, los placentinos consultados destacan que el proyecto "ha quedado incompleto, parece que la han dejado a medias porque hay zonas en las que se ven los ladrillos" y también echan de menos la adecuación del entorno con la creación de una zona ajardinada que mejore su aspecto e impida que aparquen los coches --aunque supeditan a esta actuación la creación de zonas de aparcamiento--. Con todo, la alcaldesa se reunió ayer con el consejero de Cultura para tratar éste entre otros temas.