El ayuntamiento ha admitido una recomendación del Defensor del Pueblo y ha revocado la sanción que impuso a un miembro del Campamento Dignidad por repartir octavillas en la vía pública. El gobierno impuso una sanción a dos miembros del campamento en abril del 2013 por anunciar así una manifestación. Uno abonó la multa y el segundo acudió al Defensor del Pueblo, que afirma que la distribución de octavillas en el curso de una actuación política o reivindicativa es una conducta que "inequívocamente" pertenece al ámbito objetivo de ejercicio del derecho de expresión libre.