Un 60% de las mujeres cocainómanas soportan abusos sexuales y la mitad de ellas sufren malos tratos, según se desprende de un estudio llevado a cabo por el Grupo Europeo de Estudios sobre Toxicomanías e Identidades de Género (Irefrea).

Al presentarlo ayer en el III Simposio Nacional de Adicción en la Mujer, uno de sus autores, el doctor Juan José Llopis, subrayó las diferencias notables que hay entre los drogodependientes de sexo femenino y masculino.

Por ello defendió la necesidad de que estas diferencias se empiecen a tener en cuenta a la hora de abordar los tratamientos de desintoxicación.

En busca de estas diferencias y en un estudio llevado a cabo en el 2006 en España entre mujeres cocainómanas, Irefrea se encontró también con el hecho de que un 30% de ellas habían acudido a la prostitución en algún momento, en general para costearse las drogas.

Además la mitad de las mujeres adictas a esta droga había abortado.

También el sociólogo Domingo Comas defendió un enfoque de género para tratar a las mujeres toxicómanas y denunció la discriminación a a favor de lo hombres por parte de la red asistencial.

En este sentido informó de que las mujeres representan actualmente el 15, 3% de la demanda de atención, y los varones, el 84,7%, y que una red asistencial equitativa en España supondría que las demandas asistenciales de las mujeres fueran el 26,1% del total. Algunos de los factores que llevan a las mujeres a no reconocer públicamente sus adicción y, por lo tanto, a no pedir ayuda están íntimamente relacionados con la familia.