La policía autonómica catalana desarticuló ayer en Blanes y Girona dos peligrosas organizaciones criminales que, entre otros muchos golpes, se les atribuye el asalto a un domicilio de Tordera, el pasado día 5, en el que los delincuentes maltrataron a un matrimonio obligando, incluso, a la mujer a desnudarse. Los investigadores tienen indicios para atribuir a los detenidos el violento asalto a un empresario inmobiliario de Lloret que continua hospitalizado tras ser apaleado, el pasado día 15

Los dos grupos funcionaban de manera independiente y jerarquizada. El más numeroso, integrado por 13 ciudadanos colombianos detenidos en la ciudad de Girona, se les acusa de ser los mayores distribuidores de droga de la provincia. Los investigadores, del Area Regional de Investigación de Girona, se han incautado de cerca de cinco kilos de cocaína y numeroso material y utensilios para fabricar pastillas. "Les hemos pillado con todo la droga que tenían lista para ser repartida entre los camellos durante la Navidad", comentó anoche un investigador.

La segunda banda, integrada exclusivamente por rumanos, siete en total, se dedicaba a los robos en viviendas. En principio, los asaltos eran por el método silencioso, pero, si era necesario, no dudaban en emplear violencia. La policía sospecha que este grupo es el autor del asalto y la paliza que recibió el empresario Joan Batallé en su chalet de la urbanización Roca Grossa de Lloret de Mar. El hombre, que continúa hospitalizado a consecuencia de las lesiones, será una de las muchas víctimas que, a partir de ahora, deberá colaborar con la policía para tratar de identificar a sus agresores.