El número de fallecidos en las carreteras bajó un 3,2% durante el pasado julio respecto al mismo mes del año anterior. De 278 muertos se ha pasado a 269. Estas cifras, que analizadas fríamente podrían parecer una mejora modesta, fue acogida con indisimulado alivio por la Dirección General de Tráfico (DGT). ¿La razón El primero de julio del 2006 España estrenó el carnet por puntos y el impacto mediático de su implantación motivó una fuerte bajada de la siniestralidad durante todo el verano que era muy difícil de superar. Solo que esta se hubiera mantenido en la misma cota del año pasado, ya se hubiera considerado un éxito por las autoridades.

El director general de Tráfico, Pere Navarro, alertó a inicios del verano que el número de muertos podría crecer en julio y agosto. "Es difícil sostener los excelentes datos del año pasado", advirtió entonces. Un estudio encargado por la DGT al Instituto del Investigación del Automóvil (Insia) así lo señalaba con un argumento estadístico muy fácil de comprender. Si la media de descenso en la siniestralidad que el carnet por puntos ha logrado en su primer año de implantación es del 14%, parecería lógico que esta repuntara alrededor del 4% en julio, dado que en julio del año pasado la bajada fue del 18%.

POCOS SIN CINTURON ¿Qué ha pasado para que los datos hayan superado al final las expectativas Según Navarro, del primer análisis efectuado se desprende que las campañas de control y concienciación que acompañan el desarrollo del carnet por puntos "van calando poco a poco y consolidando los comportamientos más seguros al volante". En el uso del cinturón es donde se ha dado uno de los avances más significativos. Si el 33% de los fallecidos en julio del 2005 no lo llevaban puesto, la cifra bajó al 20% en el 2006 y ahora ha caído al 13%. Casi ninguno de los muertos el pasado julio lo ha sido por no abrocharse el cinturón. Navarro destacó también la caída en la detección de alcoholemias y excesos de velocidad.

Aunque la cifra de 269 fallecidos sigue poniendo de relieve la enorme dimensión que aún alcanza el drama de las carreteras --269 familias rotas en solo un mes--, comparada con otros años, invita al optimismo.

En julio de 1989, por ejemplo, la carretera se cobró 661 vidas, más del doble. Más cerca, en el 2000, se llegaron a los 499 fallecidos, casi el doble. Sin remontarse tan atrás, la cifra de julio del 2007 es incluso inferior a la registrada los meses de mayo (273) y enero (281) del 2006, unos momentos del año en que la movilidad es muy inferior.

EL LISTON ALTO Ahora queda por delante agosto. El carnet por puntos logró el año pasado un descenso en ese mes del 23%. De 325 muertes se bajó a 250. El listón está aún más alto. Navarro tiene previsto contar mañana en conferencia de prensa como piensa encarar este difícil reto.