El Consejo de Gobierno de Canarias acordó ayer abrir un expediente informativo a la empresa eléctrica Unelco-Endesa para investigar sus posibles responsabilidades sobre la tardanza en la reposición del suministro en la isla de Tenerife, interrumpido durante la tormenta tropical Delta que azotó el archipiélago el lunes. El viento derribó varias torres eléctricas, lo que dejó sin luz a unos 200.000 abonados.

El presidente del Gobierno canario, Adán Martín, indicó que Unelco-Endesa ha informado al Ejecutivo de que ha repuesto un cable de 66 kilovoltios de la central de Caletillas que dejó fuera de servicio la tormenta tropical Delta, lo que permitirá reponer, posiblemente hoy, el suministro eléctrico del área metropolitana de Santa Cruz de Tenerife y La Laguna, así como en Tegueste.

La falta de luz en esta zona y en otros municipios provocó, entre otros problemas, robos en tiendas y vandalismo, por lo que la Policía Nacional y la Guardia Civil tuvieron que desplegarse en las calles por las noches.

os grupos del Ayuntamiento de La Laguna debatirán en el pleno del lunes la posibilidad de emprender acciones judiciales, e incluso penales, contra Unelco-Endesa por su actuación en la reposición del suministro eléctrico, según explicó la alcaldesa, Ana Oramas. Este municipio ha sufrido también restricciones de agua porque la empresa suministradora, Teideagua, necesita la electricidad para bombear.

El presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior, cifró en 108 millones de euros las pérdidas que causó el temporal en la isla, "pero sólo en lo referente al sector agrario, a los daños en infraestructuras deportivas, en el litoral, en carreteras y en patrimonio". No se han evaluado los daños en la industria, el comercio y equipamientos.