La dieta sana y rápida gana terreno entre los españoles. El informe anual Alimentación en España 2006, presentado ayer, revela que el consumo de los productos asociados con la calidad y con el ahorro de tiempo fueron los que más crecieron durante el año pasado. A modo de ejemplo, el vino con denominación de origen ha aumentado un 8,2%, el aceite de oliva virgen un 5,9%, las frutas y hortalizas preparadas, un 4,2% y los platos preparados, un 2,9%.
El aceite de oliva, el vino y los huevos siguen siendo, según el informe, los productos estrella en la cultura gastronómica. Durante el 2005 cada español consumió 10 litros de aceite de oliva y gastó 30,2 euros en este producto. El consumo per cápita de vino ascendió a 11 litros y supuso un gasto de 21 euros por personas. El gasto en huevos alcanzó hasta 16 euros y se corresponden con los 150 huevos consumidos, en términos medios por cada español.
Javier de Paz, presidente de la empresa pública Mercasa, encargada del estudio, destacó en la presentación que los datos demuestran que "comemos en función de cómo vivimos". O dicho de otra manera: la evolución del mercado alimentario está muy condicionada por los cambios demográficos que experimentados en los últimos años.
Así por ejemplo, en hogares de jubilados (21,5%), predominan lácteos, platos preparados, frutas y hortalizas transformadas y vino con procedencia regional. En las parejas con hijos, agua mineral y la bollería, lácteos y platos preparados son los productos que más se comen. En hogares con adultos y jóvenes independientes, el pescado, la carne, fruta fresca y las frutas y hortalizas transformadas. transformadas constituyen el grueso de la cesta de la compra, junto con las bebidas refrescantes y los inevitables platos preparados.
COMIDA ETNICA Los cambios demográficos también se han hecho notar en la alimentación fuera del hogar o comidas fuera de casa, que ya supone el 30% del gasto, con 455 euros por habitante.
Según el estudio, el sector de la restauración está consiguiendo un nuevo cauce de expansión por la vía de la comida étnica. "Los consumidores buscan cada vez más nuevas sensaciones gastronómicas en establecimientos especializados en preparar comidas de otros países y, por otro lado, se nota la preparación por parte de los inmigrantes de sus platos típicos en los hogares", explicó un portavoz de Mercasa.
El informe advierte de que ya hay en España 160.000 parejas formadas por miembros de nacionalidades española y otra distinta y de que el crecimiento de los establecimientos de comida rápida se ha estancado.
El gasto per cápita anual en alimentación de Catalunya es el más elevado de España y asciende a 1.528 euros. Le siguen Navarra, Cantabria y Aragón. Mientras, Murcia y la Comunidad Valencia se sitúan a la cola.
