Agentes de la Guardia Civil de Lugo han detenido a quince personas en el marco de la denominada operación "Escoyen", con lo que se da por desarticulada una banda de ladrones especializada en robos con fuerza. Según ha informado la comandancia lucense, al margen de las detenciones, la operación se ha saldado con la recuperación de la mayoría de los objetos sustraídos, que fueron valorados en 60.000 euros.

De los detenidos, todos ellos afincados en la provincia de Lugo y con edades comprendidas entre los 21 y 67 años, cuatro han ingresado en prisión y los otros once han quedado en libertad con cargos. La operación se inició en noviembre del pasado año, a raíz de las investigaciones efectuadas con motivo de la reiteración de robos cometidos en establecimientos comerciales y domicilios particulares.

El Instituto Armado destacó que la "estrecha colaboración" con el Cuerpo Nacional de Policía y el cruce de datos entre ambos cuerpos policiales propició el éxito final de la operación. Tras las primeras pesquisas efectuadas por los investigadores se procedió a la detención, el pasado 18 de febrero, de un vecino de Monterroso, de 37 años, como presunto autor de un robo con fuerza en las cosas.

A raíz de este robo, se logró esclarecer la autoría de otros hechos delictivos practicados en viviendas particulares, la pasada nochebuena, en la calle Rúa Nova de Lugo capital, donde se sustrajeron diversos efectos valorados en 20.000 euros. En el marco de las mismas investigaciones fueron detenidas otras 14 personas, y se realizaron inspecciones domiciliarias que permitieron a los agentes recuperar gran parte de los efectos sustraídos en los asaltos.

Los lugares afectados por los robos se localizan en numerosos puntos del término municipal de Lugo, donde asaltaron viviendas y establecimientos comerciales, tanto en la capital como en su área metropolitana. La banda tenía una actividad delictiva diaria y tras su desarticulación, la Guardia Civil ha constatado una "reducción significativa" de hechos ilícitos penales en las zonas donde operaban.

Los efectos intervenidos se encuentran depositados en la comandancia de la Guardia Civil pendientes de ser entregados a sus propietarios, una vez concluida esta operación coordinada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo.