Más de 1.200 bomberos, algunos procedentes de España, trabajan en la extinción de dos grandes incendios forestales en la región Centro de Portugal, ambos en el distrito de Castelo Branco, fronterizo con Castilla y León y Extremadura.

El más importante es el que se desató la tarde del pasado día 13 en la comarca de Vila de Rei, donde 903 bomberos, 248 vehículos terrestres y 5 medios aéreos trabajan para la extinción de las llamas, según la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC) lusa. En este operativo se concentran todos los medios enviados por España: una dotación de la Unidad Militar de Emergencias, el equipo de bomberos ERICAM de la Comunidad de Madrid y tres aviones procedentes de Castilla y León y Castilla-La Mancha.

El segundo incendio activo en Portugal de grandes dimensiones afecta a la Sierra de la Gardunha, una zona de gran valor ambiental cercana a las provincias de Salamanca y Cáceres y ubicada en la comarca de Fundao. Según Gaspar, en este fuego trabajan 350 bomberos, 102 medios terrestres y 3 aviones.

Siete personas tuvieron que ser evacuadas debido a la proximidad de las llamas a sus viviendas y permanece cortada al tráfico la carretera nacional N-18, entre las poblaciones de Castelo Novo y Alcaide.Un vecino resultó el lunes herido de gravedad con quemaduras severas y fue trasladado al hospital de Coimbra.