Coincidiendo con el Día mundial de la Infancia, Unicef demostró ayer que aún queda mucho para que se cumpla la declaración de los derechos del niño, aprobada por la ONU en 1959. Según este organismo, más de dos millones de menores murieron en conflictos armados durante la última década, más de seis millones resultaron heridos graves o afectados por discapacidades permanentes y un millón quedaron huérfanos.

También se hace caso omiso del estatuto de la Tribunal Penal Internacional que califica como un crimen de guerra la leva, el reclutamiento o el uso de menores de 15 años por parte de fuerzas armadas.