La ministra de Educación, María Jesús San Segundo, aseguró ayer que el objetivo de la reforma de las carreras de letras para adaptarlas a Europa es que salgan "reforzadas". "Los cambios se intentan hacer para mejorar y los títulos vigentes conservan todos sus derechos académicos y profesionales", subrayó.

San Segundo, que ayer firmó un convenio con su colega francés Fran§ois Fillon, pidió tranquilidad, ya que el proceso de reforma, que reducirá a 77 las 140 titulaciones actuales, está aún en fase "previa". En la fase actual, la subcomisión del Consejo de Universidades encargada de revisar las carreras de letras propone rebajar las titulaciones de 26 a 12. Esta propuesta conlleva la eliminación de la Historia del Arte y la reducción de las 14 filologías actuales a 4 grupos, lo que obligaría a las lenguas cooficiales (catalán, euskera y gallego) a compartir título.

El principal objetivo, según dijo, es que exista en el sistema de formación una manera de conseguir todos los perfiles profesionales que son valorados en el mercado y en la sociedad. "En el caso de las Humanidades la meta es que los estudiantes puedan elegir unos perfiles académicos y profesionales que sean aceptados y considerados valiosos", insistió la ministra.

Según ella, la reforma se está llevando a cabo de una manera muy positiva. "El 90% de las universidades se muestran de acuerdo y prevemos que, al final de año, todas hayan aceptado este modelo", manifestó. También destacó que la convergencia europea ha permitido reflexionar sobre algunas formaciones que "estaban un poco anticuadas y no se correspondían con la evolución de la sociedad".