Es particularmente grave que no se proteja a los niños, cuyos pulmones están en pleno desarrollo, de respirar humo de tabaco en locales públicos ni que se reconozca el derecho a la salud laboral de los 800.000 empleados de hostelería. La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) reiteró ayer estos argumentos al ministro de Sanidad, Bernat Soria, para mostrarle su apoyo ante la anunciada reforma de la ley antitabaco y exigir la "prohibición absoluta" del humo en los espacios públicos cerrados.

En un comunicado, Julio Anchorena, presidente de esta sociedad que agrupa a los 3.000 neumólogos españoles, recuerda al ministro que el tabaquismo pasivo causa más de 5.000 muertes anuales y que, al contrario de lo que ocurre en ocho países de la UE, en España se está conculcando el derecho de los no fumadores a respirar sin humo. La Coordinadora de Usuarios de la Sanidad esgrimió este derecho y la necesidad de acabar con las discriminación de los trabajadores de hostelería para pedir a Soria que se endurezca al ley. "Es incomprensible que algunas comunidades mantengan la marcha atrás para ampliar los espacios sin humo", censuró.

Por otra parte, investigadores del Instituto de Tecnología de California han encontrado los mecanismos moleculares que explican la capacidad de la nicotina para activar de forma selectiva sus receptores en el cerebro y no en los músculos. El hallazgo, que publica Nature , pone fin al misterio químico de la adicción a la nicotina. "Si la nicotina activara sus receptores en los músculos de forma tan potente a como lo hace en el cerebro, el tabaquismo causaría contracciones musculares intolerables y quizá fatales", sostienen.