La central nuclear francesa de Flamanville (situada en la zona norte del país) registró ayer por la mañana una importante explosión, pero las autoridades locales descartaron de inmediato el riesgo de fuga. El suceso, sin embargo, sí que causó varios heridos, cinco «intoxicados lleves», según las mismas fuentes oficiales. Según diversos testimonios recogidos ayer por la prensa local, la explosión tuvo lugar en la sala de máquinas de la planta. Según informaron a su vez fuentes de la Prefectura, no tuvo que ser activado el Plan Particular de Intervenciones, aunque uno de los dos reactores dejó de funcionar.

Según pudo saber este diario por los bomberos, la explosión y el posterior incendio tuvieron lugar «fuera de la zona nuclear» de la central. Los equipos de rescate montaron en el recinto un puesto médico avanzado, en el que fueron atendidas, aunque ninguno de los heridos está grave, según declaró Olivier Marmino, jefe de gabinete del prefecto.