Miles de personas de toda España participaron ayer en Madrid en La marcha del millón de porros para pedir al Gobierno que derogue las normas que sancionan el consumo y el cultivo del cannabis. Envueltos casi todo el trayecto por el humo que salía de los cigarrillos de hachís y marihuana, los manifestantes recorrieron el camino que va de la Puerta del Sol al parque de San Francisco el Grande luciendo una pancarta con el lema Paz y porros .

Un portavoz de la Federación de Asociaciones Cannábicas, la entidad convocante, que agrupa a una treintena de entidades de toda España, explicó que su objetivo es conseguir que el Ejecutivo se preste "por vez primera a un diálogo sobre la regulación" del consumo de marihuana, "dejando atrás el oscurantismo" demostrado por el Gobierno del PP. "Unos 8 millones de personas fuman marihuana de forma habitual en España y no se les puede seguir criminalizando", añadió el portavoz durante la marcha. Los manifestantes también pidieron la regulación legal del autocultivo y del uso terapéutico "para los enfermos que demanden usar la planta, no sucedáneos sintéticos".