El alcalde de Cervino, Giovanni Piscitelli, de 52 años, fue encontrando hoy carbonizado a pocos metros de su coche en medio del campo a las afueras de esta pequeña localidad de la región sureña de Campania. Según los investigadores, Piscitelli fue atado anoche al asiento de su vehículo, que fue rociado con un líquido inflamable para prenderle fuego.
El alcalde, cuyos familiares advirtieron anoche a la policía de su desaparición, consiguió salir del automóvil pero murió carbonizado a pocos metros, según las primeras hipótesis. Los bomberos descubrieron el cadáver después de que un agricultor de la zona denunciase un incendio en medio del campo.
El concejal Cuono Laudando aseguró hoy que Piscitelli había dejado ayer tranquilamente el ayuntamiento y que no sabía si el alcalde había recibido amenazas en los últimos días.
