"La nueva ley parece un parche más desde el punto de vista práctico, puras intenciones", asegura rotundo Augusto del Pozo, profesor de tercero de primaria (8 años) del colegio público Cardenal Herrera Oria de Madrid, en la zona norte de Madrid.

Del Pozo, que lleva 27 años dedicado a la docencia, reconoce que la LOE tiene aspectos positivos como las medidas de apoyo, refuerzos y desdobles. "Pero cada vez tenemos mayor burocracia y menos tiempo para dedicarlo a alumnos con problemas".