La Organización Mundial de la Salud (OMS) manifestó ayer su "preocupación" por la posible mutación del virus causante de la llamada gripe del pollo o gripe aviaria, lo que ha podido causar el primer contagio conocido entre humanos.

La alarma se ha disparado tras la muerte, el pasado 20 de septiembre, de una mujer tailandesa de 26 años y su hija, de 11, unos días después, por esta enfermedad. Ninguna de las dos tenía contacto directo con los pollos.

El coordinador del programa global contra la gripe de la OMS, Klaus Stohr, expresó su esperanza de que "antes de finalizar la semana se puedan tener los resultados" de los análisis efectuados por laboratorios especializados sobre las muestras del virus de los integrantes de esta familia. Los expertos quieren verificar si se trata del mismo virus detectado en los pollos de la granja familiar o si, por el contrario, se trata de una mutación propagada en el contacto entre los propios familiares.

Stohr señaló que "no se puede descartar" que se trate de un caso de mutación del virus, pero también subrayó que por el momento no parece que haya habido más contagios entre los vecinos de la localidad tailandesa. Por este motivo, la OMS considera prematuro lanzar medidas de recomendación sobre restricción de viajes.

En España, la ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, dijo que había que ser "prudentes" hasta que no se produzca "la confirmación oficial" del primer contagio entre personas de gripe aviaria.