El novillero cacereño Jairo Miguel de Cáceres sigue alcanzando la gloria mediática y la popularidad y ha logrado convertirse en portada de uno de los periódicos más importantes del mundo, The New York Times . El niño, de 14 años, protagoniza junto al francés Michelito Lagravere, de 9, el reportaje que el rotativo americano dedicó ayer en portada al éxito en Latinoamérica de los aprendices de este arte. Aunque en España el toreo está prohibido de forma profesional a los menores de 16 años, en países latinoamericanos como México o Perú la actividad de estos jóvenes está de "moda", según avanza este rotativo.

A pesar de que los astados que faenan no son mucho más grandes que ellos, estos "minimatadores", como los denomina el periódico, han conseguido atraer la atención de los principales promotores del toreo, que ven en ellos una nueva atracción para llenar los ruedos.

El diario también se hace eco de la cornada sufrida por Jairo el 15 de abril en la novillada inaugural de la feria de San Marcos (México), cuando un novillo de 400 kilogramos, de nombre Hidrocálido, le perforó el pulmón.

"Hemos tenido la oportunidad de tratar a otros toreros pero nada de esa seriedad", dijo el médico que le atendió entonces, Alfredo Ruiz, al rotativo. Y añadió: "Es el torero más joven que hemos visto. Es un niño".

No obstante, el español, según recoge la Agencia Efe, señaló que tiene pensado seguir adelante a pesar de las críticas recibidas por dedicarse al toreo a tan temprana edad. "Nunca he pensado en dejarlo. He dedicado toda mi vida a ésto. Es lo que amo", afirmó Jairo, que heredó de su padre, Antonio Sánchez Cáceres, la pasión por los toros.

Los dos viven en México durante la temporada, que comienza en octubre y finaliza en marzo, mientras que la madre y las hermanas del joven permanecen en España. Para Sánchez Cáceres, los peligros que debe hacer frente su hijo son gajes de la profesión. "Somos personas normales con un trabajo que nos pone en situaciones de riesgo; las motos y los coches causan más muertes, pero el toro piensa por sí mismo", manifestó el padre del joven al diario.

Jairo Miguel nació en Cáceres el 5 de marzo de 1993 y es conocido como el niño torero más famoso del mundo. El chaval, en dos entrevistas recientes concedidas a EL PERIODICO, aseguraba que se vuelve hombre toreando y que lo hace porque quiere, no porque se sienta obligado por su padre. "Ya estoy muy cansado de que la gente hable por mí y por mis padres. Si estoy en el mundo de los toros es por mi afición, por mi raza, por mis deseos de ser figura del toreo. Ninguno de esos comentarios tontos, absurdos e inútiles me van a hacer cambiar de opinión", decía. Jairo está convencido de que algún día llenará portadas por su arte torero. La The New York Times es un avance.