Un joven de 31 años, que se encontraba de baja laboral por ansiedad, fue detenido ayer en Valencia como supuesto autor de la muerte de sus progenitores, con quienes vivía y a cuyo padre, de 65 años, golpeó con un bate de béisbol mientras que a su madre, de 67, le aplastó la cabeza con un televisor.

El suceso tuvo lugar a primera hora de la mañana y cuando los agentes llegaron a la casa comprobaron que en su recibidor se encontraban, ya muertos, un hombre tirado en el suelo junto a un charco de sangre y en el comedor una mujer en el mismo estado.

Minutos, la policía recibió otra llamada que alertaba de la presencia de un hombre, con el torso desnudo, ensangrentado y en un estado de "gran" nerviosismo, en las inmediaciones del lugar del crimen. Sobre él, sus familiares dijeron que "tranquilo".