La titular de Juzgado de Instrucción número 1 de Manacor (Mallorca) ordenó ayer prisión incondicional para el propietario del barco pesquero en el que el lunes llegaron a la isla 34 inmigrantes argelinos de forma clandestina, por un presunto delito contra los derechos de ciudadanos extranjeros.

Según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB), la juez adoptó esta decisión tras tomar declaración al sospechoso y a su hermano pequeño, que compareció ante la magistrada como testigo, tras pasar a su disposición.

Las mismas fuentes Explicaron que el Código Penal describe el delito contra los derechos de ciudadanos extranjeros como un quebrantamiento de la Ley consistente en fomentar la inmigración clandestina.