¿Quién dice que el conocimiento tiene fecha de caducidad? Milagros Agustina González Nieto es el ejemplo de que el saber no entiende de edades porque a sus 90 años, es la decana de la Uex en Plasencia. Ya lleva cuatro años estudiando en la universidad de mayores y el próximo, se graduará --con banda incluida-- de la segunda carrera que ha hecho a lo largo de su vida.

"Yo hice Enfermería. Antes me preparé en Madrid para las oposiciones a Correos, pero estalló la guerra y se suspendieron. El título de Enfermería me lo saqué en Salamanca en el año 1943 y desde entonces, no había vuelto a estudiar".

Es una mente inquieta, tanto que incluso se ha apuntado al recién creado club de lectura de la biblioteca municipal. Una amiga la convenció de que se apuntara a la universidad de mayores y está encantada. "Es como una carrera, pero aquí no tenemos el susto de los exámenes, así que se lleva mucho mejor". De las clases dice que "sirven para recordar muchas cosas, pero hay otras que no has oído hablar de ellas en tu vida, como de Antropología, que me parece interesantísima, o de Etica". Además, relata que no solo aprenden teoría, sino que también "hemos visitado la catedral y el parador".

Pero no son los únicos viajes que ha hecho con sus compañeros de clase, porque también han visitado Toledo, Mérida o Segovia. En su periplo universitario también la ha acompañado una hermana, de 82 años, y el resto de su familia la apoya al 100% por las inquietudes y vitalidad que demuestra.

De hecho, energía no le falta porque asegura que seguirá estudiando: "Si la salud me acompaña y mi mente no se trastorna, seguiré y, de momento, me defiendo muy bien". Tanta pasión le pone a las clases que toma apuntes como en su época de colegiala, e incluso, recibió un premio por una redacción inédita sobre la región. "Nunca pensé que me iban a premiar, pero me dieron 150 euros de un accésit e incluso me lo publicaron y me sirvió de una gran satisfacción, aunque se me ha despertado la vena literaria muy tarde", dice.

No solo habla maravillas de las clases, también de sus compañeros: "Nos llevamos bien, he encontrado un ambiente cariñoso". Por eso, no duda en recomendar a los mayores que se apunten porque "No se pierde nada, son dos días a la semana que tienes obligación de salir de casa por la tarde y además, se hacen amistades".

Todas esas actividades las combina además con otra de sus aficiones, los viajes. Ha visitado América en ocho ocasiones y ha estado en Rusia, Checoslovaquia y Praga, Alemania y este año, ya planea un viaje a Estepona y quizás otro a Turquía. Además, hace de costurera, zapatera y actividades artísticas. "Me gusta tener siempre algo entre las manos", sentencia.