UN REPORTAJE con cámara oculta demostró que el sacerdote, de la diócesis de Tenerife, había hecho proposiciones sexuales a la víctima. Aunque en su momento negó los hechos, el acusado renunció a sus funciones en la parroquia y será sometido al proceso jurídico y canónico correspondiente. El obispado tinerfeño pidió disculpas en un comunicado emitido a través de su página web.