Desde ayer, la bandera azul ya ondea en la playa de Costa Dulce de Orellana la Vieja, lo que la convierte en la primera playa de interior que ostenta este título, y que la hace única en España.

El acto oficial de izado de la bandera (que certifica la calidad de la zona) contó con la presencia de la delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, la consejera de Cultura y Turismo, Manuela Holgado, el presidente de la Diputación de Badajoz, Valentín Cortés y el alcalde de Orellana, Pedro José Sanz, entre otras autoridades.

Nadie quiso perderse este momento, el pueblo estaba vacío y el pantano a rebosar, parecía un día de fiesta, aunque como bien se pudo escuchar en las intervenciones, lo era, un día en el que todos los extremeños debíamos estar orgullosos.

Carmen Pereira destacó la importancia de mantener limpia la zona y protegerla porque "la bandera nos la pueden quitar si no cuidamos la playa". Además, recordó que se han acometido varias actuaciones para tener buenas instalaciones, mediante la colocación de duchas, acondicionamiento de aparcamientos, mejor accesibilidad, instalación de un rocódromo, entre otras.

"Hemos demostrado a Europa que somos algo más de lo que se piensa, que somos una región llena de agua, que no somos una región seca, y que sabemos hacer bien las cosas. Una comunidad autónoma en la que los ciudadanos queremos demostrar que nos vamos a comer el mundo", destacó Pereira.

Por su parte, la consejera de Turismo añadió que "esta bandera representa más que la calidad de las aguas, representa la apuesta de los extremeños por un turismo de calidad y sostenible". Además, quiso tratar un tema polémico que varios vecinos reivindican, como es la apertura de la hospedería y el camping, "no voy a eludir este tema. Orellana merece unas instalaciones de calidad, y por ello requiere que no se abran ya, sino que las cosas se hagan bien cumpliendo los plazos y todos los requisitos".

Tras las intervenciones, la delegada hizo entrega de la bandera azul al alcalde de Orellana, que ya ondea en la playa.

Por su parte, los vecinos de la localidad se mostraron muy satisfechos por la obtención de este distintivo. Así lo manifestaban tres orellanenses, María Francisca, José y Rosi, que coincidían en que deberían habérselo concedido antes. Además, aseguraron que desde que fue concedida la bandera "la playa recibe visitantes a diario, no sólo los fines de semana. El domingo no cabía un alfiler". Alguno de ellos, incidió además en la necesidad de la apertura de la hospedería, ya que así "el pueblo ganaría más, ya que los forasteros se quedarían a dormir, y eso generaría más riqueza para Orellana".

La bandera ondeará hasta el 15 de septiembre, fecha en la que finaliza la época de baño.