El Ayuntamiento de Vic (Barcelona) informará "caso a caso" a la Delegación del Gobierno en Cataluña de los inmigrantes empadronados en la ciudad que se encuentren en situación irregular en España y que "no tengan los requisitos de residencia legales". El primer teniente de alcalde de Vic, Xavier Solà (CiU), aseguró que el consistorio ha decidido llevar a cabo esta medida para no "prevaricar por omisión", ya que, según dijo, se podría dar el caso de que un fiscal actuara en contra del ente municipal por incumplir las indicaciones de la Unión Europea.

La comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström, dijo ayer que "las autoridades españolas, al tener conocimiento de la presencia en su territorio de un nacional de un tercer país que se encuentre en situación irregular, ya no son libres para tolerar esta situación sin iniciar los procedimientos de retorno o poner en marcha procedimientos para concederle el derecho a permanecer en su territorio".

Posteriormente, el portavoz de asuntos de Interior del Ejecutivo comunitario, Michele Cercone, aclaró que Cecilia Malström "no se ha pronunciado sobre la posibilidad o no de registrar a las personas en situación irregular" y que lo que exige Bruselas es que la situación de esos inmigrantes se clarifique cuanto antes. En este sentido, Cercone subrayó que la Comisión "no ha tomado posición en materia de registro", ya que ese punto no está cubierto por la directiva europea aprobada en 2008.

Por su parte, Xavier Solà considera que la CE trata de decir al Gobierno "señores, procedan", ya que el ayuntamiento, que "no tiene competencias" en materia de inmigración, dejará en manos del Gobierno si expulsa a los inmigrantes o les da permiso para residir legalmente en España. Fuentes del Ministerio del Interior reiteraron ayer que, hoy por hoy, no piensan cambiar el modo en que la policía aplica la ley de extranjería por mucho que un consistorio delate a los sin papeles. "La policía no ha salido nunca a la caza indiscriminada de inmigrantes sin papeles y no va a empezar a hacerlo ahora", señalaron esas fuentes, que añadieron: "Si el consistorio de Vic lleva a cabo esa práctica se producirá una situación nueva, pues nunca antes un ayuntamiento ha delatado a inmigrantes".