Cada caso es una historia diferente. Entre las plantas invasoras, muchas se instalaron en la región por su función ornamental antes de extenderse accidentalmente, como el camalote, el helecho de agua, la acacia francesa o la uña de león.

Pero sin duda los casos más llamativos son los de las especies que se han desarrollado en el medio natural gracias a la imprudencia de particulares o empresas. Así, podríamos hablar del cangrejo americano --que se escapó de granjas--, del galápago de Florida --que era soltado por particulares-- e incluso del visón americano --que llega por ´fugas´ de granjas o sueltas intencionadas--.