El parque automovilístico extremeño no para de crecer y contaminar. Según corroboran los últimos datos de la Dirección General de Tráfico, en la comunidad hay 636.516 vehículos, una cantidad suficientemente grande como para poder formar una fila que llegue hasta Polonia e incluso que permitiría colapsar los dos carriles de una hipotética carretera hasta París y aún sobrarían. Este volumen supone que la contaminación generada por estos vehículos sea mayor que la de la industria extremeña, superándola en más de 300.000 toneladas de CO2.

La principal preocupación que origina el incremento del parque automovilístico, especialmente para los ecologistas y las Administraciones, es la enorme cantidad de contaminación y gases de efecto invernadero que expulsan a la atmósfera. Solo los vehículos extremeños tienen capacidad para generar una nube de 1,4 millones de toneladas de CO2 y para ello sería suficiente con que cada uno de los 636.516 automóviles existentes recorriese una media de solo 10.000 kilómetros al año.

En este sentido, según un estudio de la Escuela Universitaria Politécnica de Valladolid, los autobuses son los que más gases nocivos arrojan a la atmósfera, 785 gramos de CO2 cada uno de ellos por cada kilómetro que recorren. A continuación les siguen los camiones y las furgonetas (511 gr/km), los turismos (165 gr/km) y cierran el listado las motocicletas (55,9 gr/km).

LO QUE CONTAMIMAN Esos 1,4 millones de toneladas de CO2 expulsados por los tubos de escape extremeños suponen una contaminación mayor que la de la industria extremeña, que ronda los 1,1 millones de toneladas y sería 17 veces superior a lo que tiene asignado por el Gobierno la siderurgia que el Grupo Gallardo tiene en Jerez de los Caballeros. Es más, los niveles de polución del parque regional de vehículos superan con holgura los niveles de gases nocivos marcados para la cementera de Alconera (809.000 toneladas anuales), la industria más contaminante de la comunidad autónoma hasta ahora.

En este sentido, la única empresa que podría sobrepasar los niveles de emisiones de los automóviles de Extremadura sería la refinería que Gallardo pretende instalar en la comarca de Tierra de Barros. Según estimaciones de los propios impulsores del proyecto, esta industria originaría unas emisiones de entre 1,5 y 1,7 millones de toneladas de CO2.

Ecologistas y Administraciones reconocen su preocupación por esta circunstancia. Desde Greenpeace admiten que el tráfico rodado es uno de los principales focos de emisiones nocivas contra la capa de ozono. Bajo su punto de vista, puede suponer incluso la mitad de la polución generada actualmente por la actividad del ser humano. Sin embargo señalan que hay que ser precavidos porque no existen datos totalmente fiables en este sentido. Asimismo observan que los datos de contaminación del parque automovilístico extremeño y su tamaño "son cifras que no tienen por qué sorprender, ya que en España abusamos del uso del transporte privado".

Por su parte, Ecologistas en Acción se ha dirigido a los Ministerios de Industria y Medio Ambiente para que exijan a la Comisión Europea que establezca un límite obligatorio de emisiones de CO2 a los nuevos turismos. En este sentido, piden que se fije para el año 2012 un umbral de 120 gramos por cada kilómetros recorrido, muy por debajo de las prestaciones actuales de los vehículos españoles y europeos (unos 165 gr/km).

Además, Ecologistas en Acción ha acusado a la Unión Europea de ceder a las presiones de los fabricantes, con los que llegó a unacuerdo “voluntario” en 1996 parareducir las emisiones hasta los 140gramos por kilómetro en el 2008.Ante el grado de incumplimiento,afirman que “el ejecutivo comunitariose está echando atrás sinafrontar el grave y creciente problemade las emisiones en el transporte,que en el 2004 era responsabledel 28% de las emisiones”.Por su parte, en la Consejería deAgricultura y Medio Ambienteapuntan que actualmente estánelaborando los Planes para el CambioClimático, en los que se contemplaránmedidas específicas y estudiossobre la contaminación generadapor los vehículos amotor.AUMENTO PAULATINO / El aumentodel parque automovilístico regionalha sido paulatino durantelos últimos años.Entre el 2000 y el2005, ha aumentado en casi100.000 unidades, lo que suponeun incremento de casi el 20% enese periodo.Aunque también escierto que se han producido lapsosde ralentización, ya que en el 2003se registró un descenso de losvehículos dados de alta.A pesar de este crecimiento, Extremadurano está entre las comunidadesautónomas con mayorparque.De hecho, el número mediode automóviles por cada 1.000habitantes, que es de 585, es inferioral del conjunto del Estado(618).Pero aún así, es suficiente paraformar una caravana de 2.959kilómetros entre turismos, camiones,furgonetas, motocicletas, tractoresy el resto de vehículos a motor.Es decir, teniendo en cuentaque el tamaño medio de unautomóvil (según la Asociación Nacionalde Fabricantes de Automóvilesy Camiones) es de 4,65 metros,se podría establecer una cola devehículos que nos permitiese llegarpor carretera a la capital de Polonia,Varsovia, saltando de uno aotro sin tener que tocar el suelo.Evidentemente, la mayor partede ese recorrido se haría sobre losturismos, que son el tipo de vehículomás numeroso.Exactamente, enla región existen 467.580 unidades,que equivaldrían a 2.174 kilómetrosy permitirían llegar más alláde la ciudad alemana de Munich.Pero la extensión de todos esosvehículos no es el gran problema, apesar de las complicaciones de estacionamientoque sufren algunasciudades.De hecho, si todos losvehículos de la región aparcasenjuntos y teniendo en cuenta que cadauno de ellos necesita una mediade cinco metros cuadrados parahacerlo, ocuparían una superficieequivalente a 318 campos de fútbol,o lo que es prácticamente lomismo, 318 hectáreas.