Adquirir alcohol a partir de las diez de la noche parece más una decisión personal que legal. En las principales ciudades no resulta difícil hacerse con cualquier tipo de bebida alcohólica a partir de las diez de la noche pese a su prohibición. La cerveza corre libremente, pero también los líquidos de alta graduación pasada la hora que marca la ley de convivencia y ocio de Extremadura del 2003. Lo afirman los propios comerciantes que en multitud de ocasiones se ven en la obligación de recordar la prohibición.
Multitiendas y puestos de golosinas y chinos que permanecen abiertos después de esta hora copan las demandas de los que no llegan a tiempo al supermercado o de los que ni lo intentan. Este diario lo ha comprobado en establecimientos de Cáceres y Badajoz y el resultado es este: cervezas, vino y whisky al alcance de la mano. Esta situación contrasta con los datos aportados por la Junta extremeña. Durante el pasado año Sanidad, la única con competencia para sancionar a los establecimientos que incumplan esta norma, no detectó ninguna irregularidad en este sentido. Ni una sola denuncia.
Durante el año anterior, el 2008, solo un establecimiento, en la provincia de Badajoz, fue sancionado por quebrantar el horario de venta de alcohol, que lo único que persigue es que el ocio "sea compatible con la convivencia de los ciudadanos", reza la norma. La multa le costó 1.200 euros. ¿Quiere decir esto que se está cumpliendo la ley o que la ilegalidad no se ve? A juzgar por la experiencia de este diario, la ley se pasa por alto en multitud de ocasiones, principalmente por la permisividad de algunos comercios, "sobre todo tiendas de chinos", critica la dependienta de la multitienda Deseo de la calle Badajoz en Cáceres, Raquel Acero.
Pero lógicamente no es así en todos los establecimientos abiertos después de las diez. Y así lo cuenta Acero en la tienda con la norma expuesta a su espalda. "Un sábado pueden venir hasta 50 personas con la intención de comprar alcohol después de la diez", asegura. Y es que a su juicio se conoce poco la normativa. "Cuando les digo que no puedo vender algunos se enfadan y me dicen: ´¿desde cuándo está esa ley?´. Pero les da igual porque saben que en otro sitio encontrarán lo que buscan".
Con ella coincide Andrés Caso, que trabaja en la gasolinera Mirat de Repsol de Cáceres. "La gente sabe que está prohibido pero lo intenta a ver si nos convence". Se encuentra con más casos a partir del jueves y dice que "hay establecimientos que venden alcohol a cualquier hora, depende de quien te atienda". En una tienda denominada de conveniencia de puerta Pilar, en Badajoz, son también rigurosos con la norma, como en la gasolinera de San Roque, que cinco minutos después de las diez no vende ni una lata de cerveza.
Pero el caso de estos establecimientos que cumplen la ley no es el más extendido con el que se ha topado este diario. Incluso hay quienes agudizan su ingenio para seguir vendiendo a deshoras y no incurrir en la ilegalidad. Es el caso de un restaurante chino en Cáceres. Consumir dentro del local no va contra la ley, pero sí vender alcohol a domicilio como acompañamiento a algún pedido. Para que el negocio siga funcionando sin limitaciones este restaurante, del que se obvia el nombre, modifica la hora de compra del ticket que justifica la venta. ¿Error o ingenio? Más de las 12.30 del mediodía reza el justificante cuando el pedido se entregó pasadas las 23.30 horas.
Y en la misma línea, en Badajoz una conocida pizzería, que aunque cuida las formas y su imagen publicitando la norma en sus folletos, llevó hasta un domicilio cerveza junto a una pizza a las 22.55 horas. En este establecimiento se atiende, además, las peticiones telefónicas sin comprobar si éstas las hacen menores o personas mayores de edad.
Otro establecimiento en el que este diario ha comprado alcohol en Cáceres no disponía de ticket en esos momentos, quizás una buena excusa para no dejar huella pasadas las diez de la noche. Y en Badajoz, ocurre más de lo mismo en otra de las multitiendas visitadas en la zona de Puerta Pilar.
La prohibición de venta para los establecimientos no destinados al consumo inmediato se extiende desde las 22.00 horas hasta las 7.00 del día siguiente.
